Publicado por el Feb 15, 2010 en General, Noticias prensa |

Así lo destacó el director general de la Tesorería General de la Seguridad Social, Javier Aibar, durante la presentación del balance de gestión de este organismo, que cerró el año pasado con una recaudación de 1.452,8 millones de euros en concepto de regularización de deuda, el 19,3% más que en 2008.

Aibar señaló que se trata de «la mayor recaudación de la Tesorería» desde 1988, al tiempo que apuntó que la crisis económica provocó que 93.034 empresas fueran objeto de seguimiento por motivo de descubiertos e impagos.

En este sentido, la tasa de morosidad de este organismo se situó en el doble que un año antes, en el 1,99%, dato que calificó de «aceptable», por ser «inferior al de otras entidades con funciones recaudatorias, como la banca».

Asimismo, durante el 2009 la Seguridad Social autorizó 91.683 aplazamientos a empresarios y ciudadanos en el pago de sus obligaciones, casi el triple que en el ejercicio anterior, con el fin de «tender la mano» a empresas y autónomos con proyectos empresariales viables, pero que presentan dificultades de liquidez.

El número de empresas objeto de análisis aumentó el 28,74% respecto a 2008 y los sectores de la construcción y de la industria manufacturera representaron casi la mitad del seguimiento de la liquidación de cuotas que hizo la Tesorería. No obstante, alrededor del 80% de las empresas que generaron un primer descubierto normalizaron su situación.

Entre los embargos efectuados por la Seguridad Social destaca el incremento de los de bienes inmuebles, que aumentaron el 29,31%, hasta los 93.094 embargos respecto a 2008; de las cuentas corrientes, que crecieron el 11,7% y supusieron una recaudación de 231,8 millones de euros, y de las devoluciones tributarias, que se incrementaron el 39% y sumaron 91,4 millones de euros de ingresos.

Respecto a los bienes embargados, el informe puntualiza que los embargos de vehículos y embarcaciones crecieron casi el 20%, al tiempo que las medidas cautelares realizadas aumentaron el 61,3%.

Asimismo, Aibar también señaló las 609 actuaciones que efectuó la Sección de Investigación de la Seguridad Social para luchar contra el fraude y que supuso la investigación de un volumen de fraude de 88,01 millones de euros.

En este sentido, dijo que «en momentos de crisis, la Tesorería pone mayor empeño en el control del fraude» y aunque no quiso especificar datos sobre economía sumergida reconoció que «evidentemente» las actividades delictivas aumentan en situación de crisis. Destacó que las mayores actuaciones fraudulentas están relacionadas con la construcción y la hostelería y se deben a bajas y altas irregulares o a faltas de altas a la Seguridad Social.

Fuente: cincodías.com