Publicado por el Mar 3, 2011 en Cruz de San Raimundo de Peñafort, General, Noticias prensa | 2 comentarios

El salón de Plenos del Tribunal Superior de Justicia de la región, con sede en la capital albaceteña, acogerá mañana a partir de las 12 del mediodía un nuevo acto de imposición de Cruces Distinguidas de la Orden de San Raimundo de Peñafort, tratándose en este caso de cuatro abogados los que serán objeto de tal reconocimiento.

Propuestos por la junta de gobierno del Colegio de Abogados de Albacete para esta distinción concedida por el Ministerio de Justicia, se trata de Juan Beltrán Gras, Manuel Domínguez Plata (a título póstumo pues falleció recientemente), Jorge Martínez-Moratalla Martín y finalmente María Dolores Moral García, la primera mujer abogada de Albacete.

Al acto, el primero de estas características con los abogados como principales protagonistas, está prevista la asistencia del presidente del Consejo General de la Abogacía, Carlos Carnicer, del presidente del Tribunal Superior de Justicia de la región, Vicente Rouco, así como del presidente de la Abogacía de Castilla-La Mancha, José Luis Vallejo.

 También se ha cursado invitación a los diferentes presidentes de Sala además del fiscal jefe de la provincia de Albacete, Emilio Fernández García, del secretario de la sala de gobierno del máximo tribunal de Castilla-La Mancha y de la secretaria coordinadora de Castilla-La Mancha, Carmen García García.

No faltará tampoco ni el decano del Colegio de Abogados albaceteños, José Serrano, ni el vicario judicial, Julián Ros, ni el resto de decanos de los cinco órganos colegiales, al margen del albaceteño, que hay a lo largo del territorio castellano-manchego y que se corresponden con las capitales de provincia, es decir, Cuenca, Guadalajara, Toledo y Ciudad Real y finalmente, la localidad toledana de Talavera de la Reina.

El máximo responsable del Consejo General de la Abogacía Española, Carlos Carnicer, será el encargado de abrir propiamente el acto dando la palabra al decano albaceteño, José Serrano. Igualmente se dará lectura a la concesión de esta condecoración, la Cruz de San Raimundo de Peñafort que, en enero de 1944, se creó por decreto en nuestro país para premiar los relevantes méritos contraídos por cuantos intervienen en la Administración de Justicia y en su cultivo y aplicación del estudio del Derecho en todas sus ramas, así como los servicios prestados sin nota desfavorable en las actividades jurídicas dependientes del Ministerio de Justicia.

Después vendrá la imposición propiamente dicha pero previamente a la entrega de cada una de las medallas en cuestión se dará cuenta de una glosa de cada uno de ellos.

Así Enrique Martínez será el encargado de hacer la de Juan Beltrán Gras, mientras que José Serrano, el decano de los abogados albaceteños hará lo propio con Jorge Martínez-Moratalla. Otro abogado que llevó también durante años el decanato de la provincia, Ramón Bello Bañón, será el encargado de la glosa de María Dolores Moral desde el momento en que el anterior empezó como pasante en el despacho del padre de la reconocida y por último, Pedro Tárraga terminará con la glosa del fallecido Manuel Domínguez Plata.

Y quiénes las impondrán, por un lado, el presidente del Tribunal Superior de Castilla-La Mancha, Vicente Rouco, y el presidente del Consejo General de la Abogacía Española, Carlos Carnicer. El primero lo hará con Jorge Martínez-Moratalla y con el familiar que recoja la que corresponde a Manuel Domínguez Plata, y el segundo a los dos que faltan para hacer los cuatro homenajeados, es decir, Juan Beltrán Gras y María Dolores Moral García.

El colofón a esta ceremonia de reconocimientos lo podrá una comida en un céntrico hotel de la capital, teniendo en cuenta, además, que junto a los representantes de la Administración de Justicia albaceteña y manchega, sobre todo, están igualmente invitados, entre otros, familiares y amigos.

Fuente: latribunadealbacete.es