Publicado por el Jun 26, 2012 en Desahucios, General, Morosidad, Noticias prensa |

Los impagos están a la orden del día. Y es que, como consecuencia de la crisis, los indicadores de morosidad se encuentran en máximos. Según el Banco de España, la morosidad alcanzó en el mes de marzo el 8,36%, el nivel más alto en los últimos 18 años, mientras que Asnef (Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito) asegura que el saldo moroso total registrado superaba en enero de este año los 90.000 millones de euros.

Con este telón de fondo, Ibercheck nace con el objetivo de democratizar el acceso a la información financiera para que cualquier persona pueda acceder a los mismos datos que usan las grandes empresas y los bancos en su toma de decisiones. Así, se convierte en una herramienta sencilla gracias a la cual una persona física o jurídica interesada en hacer negocios con otras personas físicas podrá obtener información sobre si la otra parte tiene impagos e, incluso, si son leves o graves y en qué sectores se concentran. «En España no existe ninguna herramienta para que una persona física pueda saber la solvencia económica de otra persona», asegura Fernando Cabello-Astolfi, CEO de Ibercheck.

Los posibles usos de Ibercheck son muy variados. En concreto, es muy útil en situaciones en las que existe incertidumbre acerca de la fiabilidad de una persona como, por ejemplo, la formalización de un contrato de compra/venta de una vivienda, el alquiler de un piso, las ventas con pago aplazado o la contratación de personas.

Este producto se basa en un modelo de «transparencia colaborativa», es decir, el consultante muestra interés en conocer los datos de una persona con quien quiere hacer algún tipo de negocio y éste decide si permite o no que conozca sus datos. Sin su consentimiento, el consultante no podrá obtener la información.

«Este modelo es innovador porque ayuda a generar confianza en los negocios ya sean consumidores, autónomos o empresas. El modelo que proponemos se basa en la apertura cualificada y caso a caso de los ficheros de solvencia patrimonial. Este modelo pivota sobre la prestación de consentimiento del consultado: si no hay consentimiento por parte de éste, no proporcionaremos la información a la persona o empresa que nos la ha solicitado, ni cobraremos nada por no haber prestado el servicio», comenta Cabello-Astolfi.

La información que suministra Ibercheck en sus informes proviene, en principio, de la base de datos de Asnef-Equifax, pero aspira a incrementar el número de fuentes consultadas y, en los próximos meses, ofrecerá la posibilidad de que cada persona consulte sus propios datos y pueda enviarlos a terceros. Como parte de su futura expansión, Ibercheck está en conversaciones con agentes en Chile, Colombia y Turquía para articular una implantación de su modelo en otras geografías.

Fuente: cincodias.com